Por: Michelle Félix
Nada te que haga
ver mejor que una sonrisa limpia y saludable por eso esta semana te aconsejamos para que
mantengas tu carta de presentación en perfectas condiciones.
Primero que nada hay que
saber cómo lavar bien tus dientes:
- Divide tu boca en dos partes, la de arriba y la de abajo.
- Los dientes de enfrente de la parte de arriba tienes que cepillarlos para abajo y los dientes de abajo hacia arriba.
- Con las muelas hay que tener un cuidado especial ya que allí se acumula la mayor parte de la placa bacterial y es el lugar más propenso a caries porque es donde la lengua va dejando la comida, estás se cepillan en círculos.
- Recuerda lavar la parte de atrás de tus dientes y no olvides las encías, mejillas y lengua allí están todos los residuos de lo que nos comemos.
Es muy importante
saber escoger el cepillo correcto. Busca un cepillo de acuerdo al tamaño de tu
boca, por lo general es recomendado usar uno de tamaño mediano. Los limpiadores
de lengua los encuentras en todos los cepillos pero los expertos aun confían en
las cerdas para dejar más limpia tu boca. Puedes usar un cepillo sencillo o el
más complejo, lo primordial depende de cómo cepilles tus dientes.
El hilo dental es
básico para limpiar los pedazos de comida que se quedan entre los dientes. Úsalo
por lo menos una vez al día y puedes complementar tu limpieza utilizando enjuague
bucal después de cepillarte.
Hay muchas enfermedades
causadas por no tener una higiene bucal correcta. Es importante que las
conozcas para poder evitarlas e identificarlas antes de que el problema sea
agrave.
Una de estás enfermedades es el sarro, que es cuando los
azucares se adhieren al diente y después se convierten en caries. Éste es muy
fácil de distinguir, es un color marrón y amarillo en los dientes y encías.
Otro problema muy común son los dientes amarillos que puede ser causado por
el tabaco, la comida condimentada, el chocolate, el café, o la edad.
Existen muchos productos que te
pueden ayudar a blanquearlos pero hay que tener sumo cuidado con ellos, debido
a que son muy agresivos con los dientes por los químicos que contienen; Éstos quitan el esmalte del diente para que se pueda
adherir, es normal sentir sensibilidad al utilizarlo pero hay que evitar
el abuso de este producto.
El mal aliento es provocado por estas
enfermedades pero además lo pueden causar el estar muchas horas sin comer o el consumir muchas grasas
debido a los ácidos grasos que estos generan.
Tener una
alimentación balanceada también ayuda a cuidar tus dientes de estas
enfermedades, por ejemplo aumentar el consumo de verduras crudas, ayudan a
proteger las encías, comer manzanas a mordidas
protegen y limpian tus dientes además de que ayudan a desinflamar las
encías. Hay que tener cuidado con los alimentos muy ácidos porque sensibilizan la dentadura. Procura consumir alimentos ricos en calcio como la leche, el
queso etc. para tener tus dientes fuertes.
Beber agua constantemente mantiene tu boca oxigenada y evitar el
mal aliento. En la actualidad hay una gran variedad de chicles que te ayudan a
cuidar tus dientes.
Lava tus dientes 3 veces al día de una manera adecuada, usar hilo dental
con frecuencia y enjuague bucal, ten una alimentación balanceada, cuida tus
dientes y ¡Dame tu mejor sonrisa!
Agradecemos la colaboración de la Doctora Michelle Rosas B.
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